Por fín tengo un momento para comentar nuestro finde en Banyoles. Como ya todos sabeis el tiempo no fue favorable, nada favorable. Aun así, atrevidos que somos, salimos el sábado después de comer y en una hora y poco nos plantamos en Banyoles, disfrutando de un paisaje nevado y de una intensa lluvia. Horas antes había estado hablando con Pao, y quedamos que la llamaría en cuanto llegaramos donde nos hospedabamos. Curiosamente, casualidades de la vida, estabamos a 50 metros de su casa... Descargamos todos los paquetes y salimos a hacer unas compras y nos encontramos con Pao y Thais. Pasamos un rato agradable, los niños se montaron en los avioncitos de rigor, y aplazamos el encuentro de la familia en pleno para el día siguiente.
El domingo se despertó con una lluvia terrible, así que aprovechamos para ir al Firastoc, donde dimos una vueltita, compre un par de cosillas y nos sentamos a tomar algo mientras la troupe jugaba. A la una y media fuimos a comer y después fuimos a casa de Pao y Dario, que tan amablemente nos invitaron a café y pasteles... Los niños se pusieron las botas!!!! y Pao no hacía más que sacar zumos, pastel, yogourth para beber... Con 6 niños, ya os podeis imaginar.... Y a media tarde nos tocó coger el coche y volver para casita, no sin prometer regresar y con la clara intención de cumplir la promesa en breve....
Ya veis; el finde fue fantástico. No vimos nada del municipio, no visitamos el casco antiguo, no dimos una vuelta al lago, y ni siquiera paseamos apenas por sus calles. Pero Pao, Darío y sus pequeños hicieron de éste un fin de semana especial. Disfrutamos de su compañía, de su cordialidad y nuestros niños disfrutaron mucho juntos. Héctor y Jere conectaron al instante y los pequeños igual, y con los papis de las criaturas disfrutamos conversando una barbaridad y descubrimos que teníamos muchas cosas en común...
A veces, bueno en realidad siempre, pienso que el destino está escrito, y me parece curioso el cúmulo de circunstancias favorables que propiciaron nuestro encuentro.
Y como no, la muestra gráfica del encuentro...
Ya veis; el finde fue fantástico. No vimos nada del municipio, no visitamos el casco antiguo, no dimos una vuelta al lago, y ni siquiera paseamos apenas por sus calles. Pero Pao, Darío y sus pequeños hicieron de éste un fin de semana especial. Disfrutamos de su compañía, de su cordialidad y nuestros niños disfrutaron mucho juntos. Héctor y Jere conectaron al instante y los pequeños igual, y con los papis de las criaturas disfrutamos conversando una barbaridad y descubrimos que teníamos muchas cosas en común...
A veces, bueno en realidad siempre, pienso que el destino está escrito, y me parece curioso el cúmulo de circunstancias favorables que propiciaron nuestro encuentro.
Y como no, la muestra gráfica del encuentro...
Como veis están más tranquilitos los pequeños, que los mayores... y así fue todo el tiempo, no sólo en la foto. Los niños de Pao y Darío son una monada y además las niñas se portan de maravilla... Al final tendré que reconocer que en general las niñas son más tranquilas... :PPP
Pues ahí dejo la crónica, con una recomendación sobre Banyoles. No dejeis de visitarlo, porque seguro que allí encontrareis unos buenos amigos. Muchas gracias Pao y Da por vuestra hospitalidad, vuestra dedicación y vuestra amabilidad. Repetiremos la visita, de eso no hay duda!!!, y esperamos veros bien pronto por aquí.
